23.1.10

A mis padres


Hace apenas unos minutos que he hablado con mis padres por msn, como siempre, mi padre sentado en lo que solía ser mi cama con su copa de fino antes del almuerzo, mi madre con sus gafas controlando la tecnología, los veo en la pequeña ventanita, en la pantalla de mi portátil.

Me siento como si estuviera utillizando un catalejo kiloméeeetrico que acaba metiéndose justo por la ventana de mi habitación y allí están ellos. Les pregunto, "¿estáis leyendo el blog?", a lo que mi madre contesta "yo no lo entiendo, escribe algo que yo entienda, hombre", mientras mi padre se confiesa seguidor acérrimo y me anima a seguir. Evidentemente, son mis padres... ¿Que me iban a decir?

El caso es que, he escrito mucho durante toda mi vida pero nunca he publicado y ni se me ha pasado por la cabeza hacerlo por un montón de motivos pero hoy me he dado cuenta de que, por más extraño que me parezca, nunca he escrito nada sobre ellos.

No voy a contar aquí su vida, el cómo han sacrificado toda su vida, desde el momento en que mi hermana y yo nacimos, para darnos siempre lo mejor, siempre anteponiéndonos, siempre mirando por nosotros, siempre apoyándonos, animándonos, motivándonos, y lo más importante, escuchando, sino más bien, y sin que sirva de precedente y dejando un poco Japón esta noche a un lado, quiero decirles algo.

Hoy ha sido una conversación de muchas, les cuento lo del apartamento, la situación de la empresa, cotilleos, etc, nos reímos, le digo a mi madre 150,000 veces la frase "no te preocupes", y al final recojo el catalejo y vuelvo a estar en el silencio de mi habitación. Y entonces lo pienso, en que quizás, en mi afán de independencia y libertad, los esté descuidando un poco. Me doy cuenta de lo felices que son con solo dedicarles 30 minutos y ponerme delante de una webcam. Pues bien, Manuel y Coké, a vosotros que me distéis la vida y que vuestra misma vida habéis dado para que mi hermana y yo seamos lo que somos y estemos donde estamos, os dedico hoy unas palabras sencillas (para que mi madre lo entienda), y deseo de verdad que seáis felices, porque sois los mejores padres que uno podría tener, con vuestras virtudes y vuestros defectos. Padres, amigos y sobre todo, personas. No importa la distancia. Nunca lo dudéis ni lo olvidéis. Os quiero.

1 comentario: